Vistazo: Star wars destiny

Hace poco, vimos con tristeza como un universo muy rico e interesante abandonaba los productos de Fantasy flight games (FFG), pero quedó otro, al que le han dedicado muchos juegos y en esta ocasión hablaremos de uno más, el juego de cartas Star wars destiny.

Dejemos fuera el chiste fácil de «hace mucho tiempo…» y vayamos directo al grano, Star wars destiny es un juego de cartas, y aunque FFG ya tiene otro juegos de cartas de Star wars llamado The card game, muy original, hay una gran diferencia entre ambos, el primero es un LCG y este es un TCG (no, no me refiero a drogas sintéticas),  sino al tipo de juego, en pocas palabras los LCG son juegos de cartas donde no existe el factor aleatorio en lo que compras, todos siempre obtienen las mismas cartas, tanto en las cajas principales como en las expansiones, lo que permite ofrecer experiencias más variadas, en los TCG salvo en los paquetes iniciales, todas las demás expansiones que compres, típicamente sobres con cartas, será aleatorio, de allí que sea común el intercambio entre jugadores de cartas, (de allí la «T» en la nomenclatura en inglés), por lo que al no poder normalizar bien la experiencia del juego, debe de centrarse en un solo aspecto, generalmente batallas, que suelen ser más intensas que se las que se presentan en los LCG, aunque no hay mucho más que hacer.

Cartas y dados, buena combinación

Bueno pero vayamos al grano, Sw Destiny, es un TCG donde el objetivo es derrotar en combate a tu rival con tu mazo de 30 cartas, en esta ocasión, no encarnas a un poderoso mago o general, sino que controlaras a 2 personajes del universo Star wars, usualmente uno del panteón de héroes (ya sean del lado luminoso o del oscuro), y un oficial de primera línea, y tus 30 cartas estarán compuestos de cartas de mejora, apoyo y eventos para potenciar a tus héroes para atacar, defenderse y derrotar al rival. Para intentar destacar, este juego ofrece 2 novedades muy interesantes, la primera es que el juego debería ser llamado TCDG, ya que introduce dados, lo que añade mecánicas nuevas a este tipo de juegos, los héroes y algunas cartas adicionales incorporan dados, que al tirarse proporcionan recursos, y puntos de habilidad que luego si se tienen los suficientes permiten activar acciones especiales en las cartas, obviamente, al requerir mayor cantidad de puntos, serán más poderosas, con esto se limita un poco, un poco, el hecho de que el que tenga las cartas más OP lleva la ventaja clara, ya que si son tan buenos para tirar dados como yo, no podrán ir más allá de los ataques básicos de sus cartas.

Podrás hacer convivir a héroes de distintas épocas.

La otra novedad, es más discreta, pero igual de importante,  es el hecho de que en este juego los turnos son dinámicos, esto es, aunque tienes acciones limitadas, no necesitas esperar a que tu rival termine para hacer algo, esto es, tu rival tira una carta, tu la tuya, el tira dados, tu otra carta, el usa los dados, tu reaccionas a lo que te avienta, y así uno y uno y el turno, o ronda más bien dicho, termina en el momento en que los dos jugadores «pasan», entonces se procede a levantar el tiradero, conteo de daños, fase de mantenimiento, etc., toda la faramalla típica de estos juegos, se renueva la mano y se procede a la siguiente ronda.

La estructura de una carta de héroe

Entonces, para comenzar a jugar, eliges a tus héroes, cada uno costará cierta cantidad de puntos de reclutamiento, estas limitado a 30 puntos, algunos, permiten agregar un dado extra si pagas más puntos (otra excusa para comprar más sobres, ya que solo viene un dado por sobre), y armas tu mazo de 30 cartas, el cual debe seguir las reglas típicas en este aspecto,  y te lanzas a la batalla. Cada jugador propone un campo de batalla, que es un carta que proporciona efectos que pueden favorecer o perjudicar a uno u ambos jugadores, por una tirada de dados, se elige cual campo se usará. Hay un código de colores que ayudan a indicar si el héroe puede o no usar, dados, mejoras o eventos, decides a que héroe rival eliges atacar, y a darle átomos, habrá que derrotar a ambos rivales para ganar la partida, cada héroe tiene una cantidad de puntos de vida, cada ataque exitoso le restará estos puntos, al llegar a 0 será derrotado, o  hacer que su mazo se agote, para ganar «por tiempo» como en los videojuegos de pelea. Cabe destacar que al comienzo de cada ronda se deben tener solo 5 cartas en la mano.

Con las expansiones, se abarca más épocas de star wars

Para poder usar las cartas, cada una cuesta cierta cantidad de recursos, al principio de la ronda recibes 2, con esto, comenzaras a bajar cartas, lanzar dados, que podrán incrementar tu reserva para poder seguir usando más cartas, o activar efectos, los dados tienen distintos valores y simbologías, lo que dicta la cantidad de puntos asociados a cada una, estos símbolos están en las cartas junto con la habilidad y la cantidad que necesitan para activarse, y en la carta esta la descripción de lo que hace la habilidad. Por la cantidad relativamente pequeña del mazo de cartas, y la agilidad de los turnos, las partidas suelen ser rápidas, lo que permite en poco tiempo pasar un buen rato, esto aunado a su temática, ha enganchado a muchos a niveles adictivos, por lo que si eres de los que se enganchan fácilmente, dejarás toda la quincena en sobres.

Hay mucho que coleccionar

Sw destiny es un interesante juego que aporta novedades al genero de los TCG, es fácil dejarse seducir por este juego ya sea por su temática, o por sus mecánicas simples pero que requieren estrategia, existen packs de inicio para que dos jugadores puedan comenzar a jugar, ambientados en The force awakens, y tiradas de sobres con temáticas que cubren buena parte del universo star wars, así que hay mucho que coleccionar para aquellos que se atrevan a adentrase a este universo, eso sí, es un tanto complicado de encontrar, ya que FFG tiende a sacar tiradas reducidas, y espaciarlas mucho tiempo, aunque supongo que buscando por internet se puede entrar al coleccionismo del juego, que la fuerza los acompañe en las batallas.

Déjate seducir por el lado oscuro del coleccionismo.